viernes, 30 de marzo de 2012

Actualidad: El mundo del trabajo

Esta semana hemos empezado a ver al filósofo y revolucionario Karl Marx, coincidiendo con los preparativos de una huelga general contra la reforma laboral impuesta por el gobierno. Una reforma laboral (RD-7/2011) que recorta derechos y crea más precariedad para trabajadores y personas que demandan empleo.
En la actualidad se exige al trabajador adaptarse a la nueva situación: renunciar a los viejos derechos sociales o laborales adquiridos, "flexibilizar" los puestos de trabajo, abandonar la idea de una ocupación estable, negar el valor de la experiencia del trabajador frente a una sociedad "en constante cambio" (¿hacia dónde?). En resumen, se nos invita a olvidarnos de eso del "derecho al trabajo": el trabajo no es ya un derecho, sino una conquista en el marco de una dura competencia; una competencia en la que destacan nuevas expresiones, nuevos valores, como "ser emprendedor" o la "empleabilidad". En la sociedad de "hágalo o sírvase usted mismo" (aunque para muchos no haya posibilidades de hacer o servirse), la empleabilidad sería la capacidad que debemos adquirir los trabajadores para, desde una posición activa ("con iniciativa"), encontrar un puesto de trabajo alternativo cuando el nuestro sea destruido, amortizado o redefinido según el cambiante "mercado laboral". Además, el derecho de huelga se convierte en "salvaje" cuando no llega a un acuerdo con el patrón sobre servicios mínimos; y "piquete" y "violento" pasan a ser sinónimos en nuestros medios de comunicación.
Esta torsión del lenguaje me recordaba el libro de Victor Klemperer, en LTI. La lengua del Tercer Reich (Barcelona, Minúscula, 2001), quien advertía de la seducción y confusión que producían, incluso tras finalizar la guerra, entre los jóvenes alemanes, determinados usos lingüísticos empleados en la época nazi. Denunciaba cómo se logró imponer a la colectividad, por unos pocos individuos, un modelo lingüístico que camuflaba tanto horror: "El nazismo se introducía más bien en la carne y en la sangre de las masas a través de palabras aisladas, de expresiones, de formas sintácticas que imponía repitiéndolas millones de veces y que eran adoptadas de forma mecánica e inconsciente... El lenguaje crea y piensa por nosotros, guía nuestras emociones, tanto más cuanto mayor es la naturalidad e inconsciencia con que nos entregamos a él".

Para reflexionar sobre la situación actual del mundo del trabajo, podríamos comentar en clase este cortometraje titualdo "Pecera". Podéis coger algunas ideas sobre el actual mercado de trabajo. Espero que os guste.


Otras películas actuales también han tratado, de distintas maneras, este tema.  De algunas de ellas os dejo a continuación los trailers, que os animo a ver y reflexionar sobre sus propuestas.
El Método Grönholm, de Marcelo Piñeyro (2007), trata del fomento de la competitividad, la división y la insolidaridad entre los trabajadores.



Recursos humanos, de Laurent Cantet (1999), trata sobre los conflictos de clase y generacionales en una fábrica francesa en regulación de empleo.

Los lunes al sol , de Fernando León, trata sobre el desempleo y sus consecuencias en la vida de los trabajadores.


El film Arcadia, del director Costa Gavras, también trata sobre el drama del paro y cómo el trabajo ha pasado de ser un derecho a un privilegio por el que hay que luchar.., e incluso matar (como en la película), aunque esto me parece un poco extremo, incluso en estos tiempos.



 ¿Conocéis alguna otra película sobre esta temática? Coméntanosla.

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